De ruta con una bicicleta de trekking eléctrica

Cuando fueron puestas a la venta, pocas personas decidían hacerse con una bicicleta eléctrica. Y, si lo que buscaban era un modelo de trekking, todavía menos. El incremento de peso era uno de los principales problemas que los ciclistas veían en ellas. Sin embargo, hoy en día, esto ha cambiado ostensiblemente.

Ventajas de las e-bikes de trekking

Las bicicletas eléctricas de trekking son, fundamentalmente, bicicletas de estética parecida a las bicis urbanas o de paseo que están equipadas con un sistema de asistencia al pedaleo en forma de motor eléctrico. Pero, además, gracias a su específica configuración, también pueden conducirse sin problemas por senderos de tierra. Las principales ventajas que ofrecen son los siguientes:

1. Las cuestas empinadas ya no son una tortura. Muchas personas, por falta de condición física, lo pasan mal a la hora de hacer frente a repechos con un alto desnivel, lo que les hace mostrarse reticentes a desplazarse en bici. Con estas bicis, ese problema desaparece.
2. Posibilidad de llevar a cabo trayectos más largos. Disponer de la ayuda adicional de un motor eléctrico supone poder recorrer cómodamente varios kilómetros.
3. Se trabajan otras zonas. Puede que quienes montan en estas bicis hagan menos esfuerzo al pedalear. Sin embargo, trabajan más el tronco y los brazos. Es más llevadero, pero se activa todo el aparato muscular.
4. Más comodidad al circular por carretera. Puede que tu ciudad tenga muchas zonas de carril bici pero, con total seguridad, cuando afrontas un trayecto largo tienes que tomar la carretera. Esto genera mucho temor entre algunos usuarios ya que no son capaces de alcanzar una velocidad adecuada. Este es otro problema que no tiene importancia con estas bicis.
5. Permiten ir en bici con más edad. El paso de los años nos afecta a todos y, con él, suelen aparecer las lesiones. Estas bicis son especialmente adecuadas para quienes ya no están en disposición de realizar esfuerzos como los de antes.

Características generales de las bicicletas eléctricas de trekking

Como es obvio, las e-bikes de trekking poseen una serie de peculiaridades intrínsecas. En primer lugar, montan un motor eléctrico compacto en el cuadro con el propósito de dar impulso a la rueda trasera y facilitar así el pedaleo. Este está provisto de una batería que le suministra la potencia y que permite que funcionen. Su autonomía puede ser de hasta 8 horas sin problemas.

El motor suele poder regularse durante la marcha y la batería cuenta con diversas ubicaciones en la que se puede colocar. Además, para cargarla basta con extraerla y conectarla a la corriente con un enchufe normal.

Más allá de esto, las bicicletas de trekking eléctricas disponen de ruedas de 28", así como de guardabarros, sistemas de iluminación, frenos de disco, etc. También es frecuente que cuenten con portaequipajes por su carácter urbano. El sillín también suele ser más grande y cómodo de lo normal ya que estas bicis dan prioridad al confort. En resumen, te costará muy poco encontrar una acorde a tus gustos y necesidades.

Desde Bikester, por si acaso aún tienes alguna reticencia en torno a ellas, queremos invitarte a que pruebes una bicicleta eléctrica de trekking. Estamos seguros de que la experiencia te va a resultar mucho más satisfactoria de lo que imaginas.