Pulsómetros

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Un pulsómetro es un pequeño dispositivo electrónico, generalmente de pulsera, cuya principal función es la de, mediante una banda o cinta torácica, medir la frecuencia cardíaca del deportista durante el entrenamiento o una prueba de competición. Sin duda, son extremadamente versátiles, por lo que pueden usarse para infinidad de deportes y actividades diferentes, como el ciclismo, la natación o el atletismo, por ejemplo.

¿Por qué es recomendable usar un pulsómetro al hacer ejercicio?

Un pulsómetro es un dispositivo ideal para medir la intensidad del ejercicio. Imagina, por ejemplo, que sales a correr y que te has marcado el objetivo de perder algún kilo que te sobra para sentirte más en forma. Gracias a él, podrás controlar el número de pulsaciones que tienes en cada momento durante la carrera, lo que te permitirá ajustar tu ritmo para optimizar la quema de grasas y, de paso, hacer crecer tu nivel de resistencia.

Por su parte, son extremadamente cómodos, por lo que apenas notarás que los llevas puestos. Y es que, por lo general, la banda pectoral, la cual actúa a modo de sensor cardíaco, se conecta al dispositivo de muñeca mediante una conexión Bluetooth, es decir, sin cables. También se ajusta a la perfección a la anatomía tanto masculina como femenina. De este modo, además, podrás ajustar la intensidad a las circunstancias y ritmos de tu cuerpo, lo que evitará que empieces demasiado fuerte excesivamente pronto y reduzcas así el riesgo de sufrir una lesión.

Características imprescindibles de un buen pulsómetro

Un pulsómetro no debe ser, única y exclusivamente, un aparato capaz de medir la frecuencia cardíaca cuando haces ejercicio. En este sentido, son capaces de ofrecer muchas otras funcionalidades adicionales muy interesantes, por lo que es recomendable que, cuando elijas un modelo, pueda hacer muchas otras cosas. Estas son algunas de las características más importantes que debe ofrecer:

1. Batería de gran capacidad. El tamaño de estos dispositivos es muy reducido, pero esto no quiere decir que no sean capaces de contener baterías de gran autonomía. Algunos de ellos son capaces de permanecer en funcionamiento hasta una semana entera sin tener que ser cargados.
2. Reloj y cronómetro. Un pulsómetro debe servirte como reloj siempre que quieres y, además, disponer de un cronómetro que te sirva para controlar la duración de tus sesiones de entrenamiento.
3. Alarma. Es interesante que el dispositivo te permita establecer un rango de frecuencia cardíaca ajustada a tus objetivos y, en caso de que te salgas de él, avisarte mediante una alarma para que incrementes el ritmo o lo bajes.
4. Memoria y conexión a ordenador. Si el dispositivo dispone de memoria interna, podrás volcar a un ordenador los datos relacionados con tu entrenamiento para analizarlos en detalle posteriormente. De este modo, sabrás qué puntos debes mejorar.
5. GPS. Si te gusta salir de ruta, ya sea corriendo, haciendo senderismo o montando en bicicleta, un GPS te va a venir fenomenal. Puedes descargar los mapas y establecer caminos con anterioridad e, incluso, orientarte para volver al punto de partida en caso de que te hayas perdido.
6. Contador de calorías. Muchos dispositivos de este tipo cuentan con contador de calorías, pero esto no quiere decir que sean fiables. Para serlo, necesitan efectuar cálculos precisos entre tu peso, tu altura, tu ritmo cardíaco, el tipo de ejercicio, su duración, etc. Asegúrate de que sea preciso en este sentido, sobre todo, si quieres que te ayude a perder algunos kilos.
7. Predicción del ritmo cardíaco y de la capacidad aeróbica máxima. Hoy en día existen pulsómetros inteligentes capaces de predecir ciertos valores realmente útiles como estos. En este sentido, te ayudarán a conocer mejor tus límites y a superarlos poco a poco.
8. Resistencia. Asegúrate de que el modelo que elijas posea certificaciones de resistencia frente al agua y el polvo. En este sentido, la IP67 es más que suficiente en la mayoría de los casos ya que garantiza que el dispositivo es totalmente resistente a las partículas y puede sumergirse en agua a una profundidad de un metro.

Confía siempre en marcas de prestigio

Pulsómetros hay muchos. De hecho, los hay de todos los precios que puedas imaginar. Sin embargo, como es evidente, no todos ofrecen las mismas prestaciones. En este sentido, algunas marcas, debido a su dilatada experiencia y a la eficacia con la que desarrollan este tipo de dispositivos, son mucho más adecuadas que otras. Además, ten en cuenta siempre la disciplina para la que lo vas a utilizar y compra en consecuencia. Y es que no es lo mismo que lo quieras para montar en bici, correr o hacer fitness, por ejemplo.

Sin duda, Polar y Garmin son dos de las marcas más conocidas en el universo de los pulsómetros. Por lo general, aunque los precios de sus dispositivos sean ligeramente más elevados que la media, lo cierto es que suponen una inversión bastante rentable. Por un lado, son extremadamente resistentes, a lo que habría que añadir que cuentan con una gran autonomía y que ofrecen prácticamente todas las prestaciones que cabría imaginar. Tanto es así que algunos de sus modelos no necesitan una banda torácica para medir la frecuencia cardíaca ya que son capaces de captarla directamente de la muñeca.

Otras marcas muy interesantes que también destacan por la calidad de sus pulsómetros son Sigma y Suunto, aunque hay muchas más. Todas ellas están recogidas en este completo catálogo de Bikester, el cual está pensado para ofrecer soluciones a tus necesidades deportivas.